Not known Details About relaciones amorosas
Paciencia: El amor verdadero es paciente y comprensivo, incluso en tiempos difíciles. La paciencia ayuda a navegar los conflictos y los problemas de la vida.
Según John Gottman, un renombrado psicósymbol en relaciones, “el amor verdadero es una admiración profunda y respeto por la pareja que se manifiesta a largo plazo”
Para construir el amor es necesario formar un equipo y establecer las normas del juego. Para poder saltar a esa cancha relacional y afectiva deberíamos saber que son necesarias la comunicación, la escucha sincera y empática, los diálogos abiertos y la eliminación de pretensiones.
Un terapeuta nos da su opinión sobre este tipo de amor y nos cuenta si se pueden aspirar o no a alcanzarlo
Para amar sin dependencia ni necesidad, hace falta valorarnos a nosotros mismos primero. Por tanto, no olvidemos lo siguiente, para decir “te quiero” primero debes saber decir “me quiero”. El amor propio y el conocimiento de uno mismo son las claves para generar relaciones saludables.
Admirar a la pareja por sus cualidades, logros y fortalezas es esencial en una relación amorosa. La admiración mutua fomenta el crecimiento personal y refuerza el vínculo entre ambos.
«El Beso» de Gustav Klimt: Esta famosa pintura simboliza la pasión y el romance. La fusión de los amantes en colores dorados y patrones entrelazados representa una unión casi espiritual, capturando la esencia del amor verdadero en su forma más física y emocional.
En el caso de la pareja divorciada con brusquedad, la alternativa de la indiferencia parece preferible e incluso más "civilizada" que otras, pero generalizar entraña ciertos peligros.
Este apoyo incondicional, especialmente en momentos de disaster o incertidumbre, es un claro indicativo de amor verdadero.
Para él, "lo excellent es que exista un proyecto de pareja que una a ambos, permitiendo el crecimiento conjunto, mientras cada uno mantiene un proyecto individual que le otorgue identidad y realización private". En definitiva, es esencial mantener la individualidad y al mismo tiempo que se fortalece el vínculo.
Si un miembro de la pareja veta una parte del otro, es hora de decir adiós y dejar marchar. Debemos ser capaces de restablecer prioridades, de salvaguardar nuestra dignidad.
La dependencia y el amor están tan reñidos que si les obligamos a coexistir, se destruyen. Nadie en la vida tiene la responsabilidad de completar lo que nos falta.
Los espacios y tiempos personales de cada uno de los miembros de una pareja son una parte elementary de la read more estructura de un vínculo sano. Si no existieran, ambos quedarían apelmazados y fusionados en una amalgama que, lejos de enriquecerlos, los empobrecería.
La pareja se alimenta de la diversidad y, para que esta exista, deben estar definidos los distintos espacios, intereses y tiempos. Debemos hacer saber a nuestra pareja que no dejamos de amarla ni de prestarle atención o tenerla en cuenta a pesar de que nos agrade tener tus espacios de soledad. Porque los espacios personales no son, ni deben ser, una amenaza para el otro.
Pero ¿qué pasaría si esa suposición no fuera correcta y lo que hubiera en el lado opuesto del amor no fuera el odio?